Mal día para Arón en esta segunda jornada del Gran Premio Lenovo di San Marino e della Riviera di Rimini, muchos problemas, cambios de setting, caídas, sustos … todo ello ha provocado que nuestro piloto no haya podido clasificarse directamente para la Q2.
En la Q1 los problemas han continuado, en los instantes finales a punto a estado de irse al suelo, y por tanto Arón sólo ha podido ser 8º lo que le sitúa en parrilla en la 22º posición; gana una posición por la sanción del poleman y finalmente partirá 21º en la 7ª fila de la parrilla.
Si analizamos bien la situación, la FP3 ya le ha salido torcida, dos caídas, la segunda de ellas en los instantes finales y cuando venía en tiempo para situarse entre el 7º y 9º lo que le hubiera aupado directamente al segundo qualifying, pero con un tiempo de 1’37”125 sólo ha podido clasificarse 17º a 613 milésimas del mejor registro de la sesión y de la combinada. Ya en el qualifying 1 más de lo mismo, problemas y su tiempo –1’37”347– ha sido incluso más lento que el de la FP3.
Así ha comentado Arón todo el calvario que ha pasado hoy:
Ha sido un día complicado porque he sufrido dos caídas en el tercer entrenamiento libre y eso nos ha dejado fuera de la Q2. En el cronometrado, hemos intentado realizar unos cambios para mejorar, pero no nos ha ido tan bien como esperábamos. Intentaremos mejorar mañana lo máximo posible la puesta a punto durante la sesión de calentamiento, y en carrera tocará seguir aprendiendo.
En fin mañana toca remontada. Arón saldrá al warm up a las 8:50, esperemos que se solucionen los problemas, porque a las 12:20 tendrá una difícil carrera saliendo desde la 7ª fila.